Cada vez que usas una cuchara, se renueva el estado anterior.
Probar, batir, agregar, o decorar, es cambio. Y todo eso está al alcance de tu mano.

lunes, 16 de marzo de 2015

¿Te pusiste a pensar cuando aparece una cuchara?

Cuando te das de comer, cuando das* de comer, cuando cocinás o cuando probás algún sabor nuevo, cuando batís ideas con una taza de café o cuando pasas un buen rato con alguien que querés.

Mercibocú te alienta a sumergirte en muchos más momentos así.

Te.cito a tomarte un buen tecito. Siempre.

¡Bienvenido al mundo de las cucharitas!


jueves, 20 de noviembre de 2014

Inspir.arte.

Para mí que - sí o sí - tiene que ver con inspirar...¡así!, sumar aire a los pulmones.
Que podrían estar en cualquier lado, pero lo más zarpado es que están en el pecho, justo al lado del corazón.

Entonces, ponerle el pecho, me dijo Papá alguna vez. Sangre, corazón y sopa. Porque ¡claro! el arte y la cocina siempre estuvieron ligados: y así como si nada, todo termina en el liver...de ahí la palabra live. CaUsalidad.
¡Mseh! alguna vez el corazón y el hígado compitieron por ser el órgano más importante de todos.

Por eso, es casi orgánico seguir al corazón.

No hay mucha explicación (la otra vez pensaba) para contarle a alguien lo que significa hacer lo que te gusta.

Es eso nomás.

¡Espero que respires, o inspires! Que es casi lo mismo, porq el -re- es nomás el ruidito que le da marcha al motor.

Cœur, una de las primeras petitcucharitas de Mercibocú

miércoles, 5 de noviembre de 2014

Cubo mágico

Tríada: Grulla, Loto y Hamsa.


Hola, mi nombre es María Pía, y aprendí que el cambio es genial.

Después de estudiar una carrera, ejercerla y vivir de eso un tiempo - me animé a crear - algo que hice casi siempre, pero sin darme cuenta.

Los colores, la luz, las letras, la música y los plumines, aparecen en cada uno de mis dedos.

Nada de cubículo, taller; encuentro y abrazos de mis seres queridos.

Hoy cuando explico que quiero hacer, hago una seña con las manos tipo -armar un cubo mágico-, que vaya más allá de mí, en agradecimiento a los momentos de calidez, que podemos darnos todos los días.

Dejar algo distinto para quienes, como yo, andan flotando sin ninguna regla que altere su camino.